La Palma, el cielo de
las estrellas.
Cada amanecer, cada
atardecer y cada noche La Palma nos regala una estampa única si miramos al
cielo. Cada pupila capta, a su manera, los colores, los matices y las formas
que desde el infinito se nos presenta.. Desde la orilla del mar a la cumbre son
muchos los ojos que pueden estar al unísono mirando a un mismo punto luminoso.
3º premio |
¿Qué vemos? Pues cada ojo se convierte en un pequeño telescopio que captara la
luz y la procesará para convertirla luego en una imagen, un estudio, un
sentimiento. Si a la imagen le añadimos el sentir de lo que pisan nuestros pies
y el calor que nos da esta tierra palmera tenemos no sólo una imagen sino el
por qué de una historia, de una tradición y de un futuro.
Nuestros campeones |
Por esto los alumnos de
secundaria del Colegio Santo Domingo de Guzmán “La Palmita” han intentado
plasmar lo que significa “La Palma, el cielo de las estrellas”. Una oportunidad que se ha brindado desde La
Molina Artesanía tanto al Colegio de “La Palmita” como al Colegio de la Sagrada
Familia de Los Llanos de Aridane.
De este a oeste, como
ese Sol que cada mañana ilumina las galerías del Colegio e inunda en el saber
de cada mesa y de cada pizarra que guarda el conocimiento del futuro. Un Sol
que ilumina en el Roque de los Muchachos al GranTecan y que al caer la tarde
ilumina el oeste para perderse en el horizonte hasta el día siguiente y dar
paso a la noche, siempre mágica. Dónde la protección del mismo se une por el
amor a un paisaje, una historia y una vegetación que nos hacen únicos y privilegiados
de vivir en esta tierra.
Los Campeones |
Muchos han sido los
trabajos presentados para este concurso dónde el diseño, la fotografía, la
pintura y el mobiliario, entre otros, es lo que exigían las bases. De todos se
han tenido que seleccionar a 15 obras. Una ardua y complicada tarea debido a la
gran calidad presentada.
2º premio |
El criterio ha sido
elegir una variedad tanto en diseño, pintura y fotografía. En ellos la historia
esté presente, desde el mundo aborigen con los benahoritas, las espirales, etc.
La vegetación propia, desde el cardón, el tajinaste, la tabaiba.
El mundo
científico del Observatorio del Roque de
los Muchachos con los telescopios, las constelaciones…La protección del
cielo, etc. Desde el trabajo de diseño, a la pintura, el dibujo o la escultura
en barro y la manualidad. Un gran reconocimiento sólo con haber participado en
lo que ha servido para ser integrantes de esa “Palma, el cielo de las
estrellas”. Son pequeños puntos de luz que empiezan aquí a brillar para un
futuro.
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